Lo que ocurre, es que cuando no encuentra la evidencia, el cerebro generalmente se rige por el principio “mejor malo conocido que bueno por conocer”, porque su prioridad número 1 es que estés a salvo.
En estos casos, entra en modo PELIGRO, y empieza a crear argumentos / pensamientos / ideas que buscan convencernos de que no vamos a poder, con el objeto de que no lo hagamos y que de esta manera, estemos a salvo.
- qué cosa te gustaría hacer o lograr, y creés que no tenés la experiencia para hacerlo?
- si te planteas hacerlo o lograrlo, qué te dice tu cerebro? cuáles son los peligros? qué es lo que puede pasar?
Si siempre escuchamos a nuestro cerebro cuando tiene miedo ante lo desconocido, posiblemente no vamos a poder conseguir algunas cosas con las que soñamos.
Entonces, qué hacemos si queremos confiar en nosotras mismas a pesar de estar haciendo algo por primera vez?
Te ofrezco aquí algunas estrategias que fui descubriendo que son efectivas
CREAR EVIDENCIA
Una de las formas, es creando evidencia. Cómo lo podés hacer? Haciendo lo que no hiciste nunca.
Si vas por esta opción, te recomiendo no darte mucho tiempo para pensar y dejar crecer el miedo. Simplemente hacelo.
Aquí vas a actuar con miedo, mientras sentís miedo.
Esta es una habilidad super interesante para desarrollar porque el miedo es una de las emociones más fuertes que podemos experimentar y no siempre es adecuado a las amenazas o peligros que experimentamos.
Tomando acción, además de estar construyendo esta habilidad de poder actuar aún cuando tenés miedo para que cada vez sea más fácil para vos, también estás creando evidencia para tu cerebro de que a veces, hacés cosas que no sabés hacer y sobrevivís
- qué podés hacer hoy mismo para crear evidencia de que podés hacer esto que querés hacer?
CONFUNDÍ A TU CEREBRO
Lo primero que te invito a preguntarte es qué habilidades específicas necesitás para poder hacer esto que querés hacer.
Si querés lanzar un emprendimiento, tal vez entre otras cosas necesites:
- aprender un poco de negocios, marketing y ventas
- ser muy organizada
- gestionar muy bien tu tiempo
- ser buena comunicando
- desarrollar relaciones y en algunos casos negociar con proveedores, clientes y colaboradores
- saber tomar decisiones
- resciliencia (la capacidad de poder superar circunstancias difíciles e incluso salir fortalecida)
Entonces, te pregunto:
- para conseguir esto que querés conseguir, qué tipo de mujer necesitás ser? te invito a que des todas las características que se te ocurran
- entonces, qué habilidades específicas vas a necesitar?
- cuáles de las habilidades que necesitás tener para conseguir esto que querés conseguir, en realidad, ya las tenés?
- cuándo las usaste?
- qué necesitás para poder usarlas en este proyecto?
- qué habilidades necesitás aprender?
- qué vas a hacer concretamente para poder aprenderlas?

Hoy vimos 2 estrategias que te ayudarán a animarte a hacer algo que no hiciste nunca “a pesar” de esa parte “sobreprotectora” de tu cerebro.
De todo esto,
- qué es lo más interesante que te llevás?
- cómo lo vas a aplicar en tu vida específicamente?
Descubrí que para desplegar mi propia magia, muchas veces tengo que trascender esa parte “sobreprotectora” de mi propio cerebro. No ignorarla pero sí trascenderla. Ir más allá.
Deseo que encuentres tu propio camino para hacerlo y que eso nos permita ser testigos de esa luz que sólo vos podés hacer brillar
Si conocés a alguien a quien le pueda ser útil este artículo, te invito a compartírselo!
Hasta la próxima!
Si te interesa profundizar en esto de animarte a hacer algo que nunca hiciste o en incrementar tu confianza en vos misma, te invito a escribirme a sesiones@sosmagia.com.ar o enviarme un mensaje aquí para coordinar una conversación de 30 minutos por teléfono o skype totalmente gratuita para que me cuentes un poco sobre vos y el punto en el que estás, y evaluemos la posibilidad de trabajar juntas.